Oración
Señor Jesús, en este camino de amor y entrega, queremos acompañarte con humildad y devoción. Cada paso que diste hacia el Calvario fue un acto de amor infinito por nosotros; cada caída, una prueba de tu sacrificio por nuestra salvación. Enséñanos a meditar con un corazón sincero cada estación de tu Pasión, para comprender el peso de nuestros pecados y la grandeza de tu misericordia.
Te pedimos que nos des la fuerza para cargar con nuestras propias cruces, aquellas pruebas y dificultades que encontramos en nuestro diario vivir. Ayúdanos a aceptar el sufrimiento con fe, recordando que Tú nos sostienes en los momentos de debilidad. Que al verte caer y levantarte, aprendamos a no rendirnos en nuestras luchas. Que al contemplar tu dolor, aprendamos a amar y perdonar como Tú lo hiciste.
Señor, que cada paso de tu Vía Crucis nos acerque más a Ti, que cada estación nos transforme y nos haga más fieles a tu voluntad. Danos un corazón compasivo para ayudar a quienes sufren, un espíritu generoso para aliviar el dolor de los demás y una fe firme para nunca apartarnos de tu camino.
Y al final de nuestra vida, cuando llegue nuestro propio momento de cargar la cruz definitiva, concédenos la esperanza de la resurrección, sabiendo que contigo la muerte no es el final, sino el inicio de la vida eterna.
Amén.
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