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ToggleSacerdote Carlos Yepes es la historia de un hombre elegido y amado por Dios, desde siempre. ¿Quién pudiera imaginar que un joven de 22 años graduado de la carrera de Derecho, conjuntamente con su madre, tuviera otro horizonte en la vida?
¿Cómo se podía vislumbrar que este joven sentiría interés en ver al Papa Juan Pablo II, sumo pontífice del Vaticano, en el año 1986 cuando el Santo Padre llegó a Colombia?
Dios nos habla a todos los seres humanos, de formas distintas y nos llama en circunstancias y rostros concretos para que logremos un propósito de vida. Es precisamente este acontecimiento histórico del líder del Vaticano, el Papa Juan Pablo II, el que ilumina esta alma inquieta. Aquel día, mientras tantas personas disfrutaban de la presencia del Santo padre, el shock, la crisis y el llanto hicieron catarsis en este joven conmovido interiormente. Sin saber muy bien la moción que movía su corazón, se despertaron interrogantes existenciales sobre lo que realmente quería para su vida, y lo que era de verdad importante y trascendental en la existencia.
Las preguntas retumbaban en su mente, una y otra vez, buscando respuestas. Finalmente, después de una tarde de profunda búsqueda y desahogo, le surge la Iluminación. Yepes, supo desde ese momento que quería ser sacerdote, y su misión era “Evangelizar y atraer almas para Dios”.
Si miramos este episodio particular, todos reconocemos que, en algún momento de la vida, necesitamos tener claridad para darle sentido a lo que hacemos. Y en esta búsqueda de sabiduría, hay algo fundamental que debemos cultivar, y son los espacios de silencio, dialogo interior y comunicación con Dios.
Es precisamente en estos tiempos fuertes de oración donde más podemos discernir con precisión una situación, un evento, una forma de obrar y de vivir.
Por eso, Yepes, no tenía dudas, había tenido un proceso de discernimiento y sabía lo que anhelaba su corazón. Desde ese entonces, empezó a escribir una historia que se ha tejido con cuerdas de amor y lazos de ternura de las manos de Dios.
Carlos Yepes desde que era seminarista, cultivo su vocación de servicio, él hacía misiones a pueblitos de Antioquia, recorría veredas de casas campesinas y enseñaba la palabra de Dios. Solía decir: “que bello y hermoso es sembrar el amor de Dios en las personas, y que alegría tan profunda es dar lo mejor de sí para los demás, para su salvación”
El día en que fue ordenando como sacerdote de la Arquidiócesis de Medellín en diciembre de 1993 sabía que tenía un mundo por delante para trabajar para el mejor y más grande patrón “Dios”. Su trabajo le parecía demasiado apasionante, solo quería servir y evangelizar, lo quería hacer con amor.
Entendió que el servicio incluía dar su tiempo para escuchar, entender, ayudar, guiar, acompañar a las ovejas como un buen pastor, y que en la medida en que moría a sí mismo, entregando lo mejor de sí, mayores iban a ser los frutos, porque allí se abría camino a la gloria del Señor. Entendió, además, que la Evangelización era para todos, y no debía limitarse a un espacio, barrio, ciudad, sino que todos eran convocados a conocer a Cristo.
Fue así como empezó su trayectoria sacerdotal en parroquias, haciendo lo que más quería hacer: servir y evangelizar, pero Dios le tenía deparado una misión diversa en su ministerio.
Las circunstancias lo llevaron a trabajar en el departamento de comunicaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) entre los años 1996 y 1999, y allí pudo conocer cómo era el manejo de los medios de comunicación, qué había en la Iglesia, cuáles eran las necesidades y el futuro de la comunicación.
Así fue como en su sueño de atraer más almas a Dios, detectó una enorme oportunidad de mirar un camino de evangelización a gran escala: crear un canal de televisión católico, que, hasta entonces, no había en Colombia.
La idea fue acogida y materializada por una congregación católica en su ciudad natal, Medellín. Y así empezó el primer canal católico regional en Antioquia que hoy en día cuenta con gran aceptación en la audiencia católica colombiana.
El aprendizaje y apoyo a este canal de televisión durante 16 años, lo motivó a tener un proyecto que llevara el mensaje evangélico a más lugares de Colombia y el Mundo, por medio de la Internet. Allí, en la web donde solo había opciones de “entretenimiento”, “educación”, “música” faltaba un mensaje claro, preciso y trascendente de la vida, donde se hablara de Dios, del amor, de la familia, del servicio a los demás, de los valores, de construir una sociedad mejor.
Pidiendo con fe la inspiración del Espíritu Santo y meditándolo en oración, fue iluminado, y un 19 de marzo de 2010, día de San José, se fundó Amén Comunicaciones, que nace como una respuesta al llamado del Magisterio de la Iglesia, para anunciar el evangelio en los “areópagos modernos” como son las Tecnologías de la Información y la Comunicaciones (TIC). Amén Comunicaciones significa: Apostolado en los Medios para una Evangelización Nueva.
Esta productora católica dirigida por Carlos Yepes Padre, hoy está conformada por un grupo de sacerdotes, laicos comprometidos en la fe y especializados en las áreas de producción audiovisual, comunicación digital y radio on line. Actualmente, llega a todos los lugares del mundo a través de la web y está a la mano de cualquier persona, en tiempo real, a través de un celular, una tableta o un computador.
En el 2010, Carlos Yepes Padre ve la necesidad de evangelizar a gran escala, sin fronteras, de manera global, ir a donde la palabra de Dios no llegaba.
Quería evangelizar con un nuevo lenguaje, no tan cerrado, teológico, técnico, acartonado, sino, con la expresión más existencial, más desde el a pie de cada persona, es decir, desde la cotidianidad. Esa intuición le llegaba al pensar en el Jesús-comunicador de este siglo. Se preguntaba cuáles serían los retos actuales que tendría que asumir Jesús para transmitir la Buena Noticia y poder llegar a las personas.
Pensaba en la necesidad de estar en la internet con la frescura y espontaneidad que empezaba a representar este medio; en una predicación, más propositiva que negativa, más existencial que conceptual, más cercana y no tan lejana, encarnada en la realidad, antes que etérea o abstracta. Una predicación que no solo enseñara, sino que diera respuesta a los sufrimientos e interrogantes.
Yepes, tenía en su corazón el objetivo de atraer más almas a Dios, y necesitaba romper paradigmas, mirar nuevos horizontes, saber cómo llegaba con la palabra del Evangelio a más personas en cualquier lugar, descubrir nuevos espacios y formas de evangelizar.
Este llamado, lo llevó a considerar la virtualidad como un camino de evangelización, ¿porque no? Si Dios está en todas partes y hay sed de Él en el mundo. Aunque no lo sepamos todos necesitamos del Dios amor, del Dios Padre, del Dios Misericordioso, el real y verdadero Amor que se cultiva y está en el Señor.
Es simplemente entender que con el avance de la tecnología y del mundo moderno, debe también avanzar las nuevas formas de Evangelización. Ahora más que nunca se requieren sociedades más humanas, fraternas, transcendentes, espirituales que miren más allá de la materia, de lo meramente racional; seres humanos con mejor corazón, hogares más unidos, personas más felices, seres de paz, alimentados por Dios.
Quedaba claro que había una necesidad y una oportunidad en la evangelización, ahora la tarea era cómo esa idea se podía cristalizar. Por ese entonces, en el 2010, el Cura Yepes estaba en la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, una iglesia ubicada en la zona centro de la ciudad de Medellín, Colombia. Un sector ocupado por talleres de carros e indigentes, que a través del tiempo fue llamado por los habitantes: Barrio triste. Aunque, como dato curioso, con el trabajo pastoral que el Sacerdote hizo en la zona, logró cambiar el chip de quienes veían tristeza en el entorno, y les exhortaba diciendo que donde está Dios no hay tristeza, por eso aconsejaba llamarlo Barrio Alegre. De hecho, un gran pendón colgaba de la parte alta de la iglesia para que las personas que transitaban todos los días por allí y lograban ver el sector desde los vagones del Metro de Medellín leyeran la frase: “¿Barrio Triste?: Donde está Dios no hay tristeza”.
Aun siendo una parroquia marginada por estar ubicada en el lugar con las características mencionadas, y sumado a que no lo habitaban familias, el Sacerdote emprendió una labor pastoral y social con indigentes, y sembró en ellos, y en las personas que empezaron a llegar procedentes del “El Hueco” -espacio de locales comerciales tradicional para la Ciudad- la devoción de los viernes del Corazón de Jesús, y de los martes a la virgen María.
También desarrolló talleres para matrimonios y grupos de oración, con la convicción de llenar de esperanza un sector que más que motores para carros, necesitaba el motor de la Palabra de Dios. Y allí, entre la oración, las catequesis, los análisis históricos, políticos, económicos, culturales, y aun religiosos, se trazó la nueva forma de evangelización para dar respuesta al hombre del siglo XXI.
Sin mayores recursos, sin gente, ocupando un sencillo salón del segundo piso de la casa cural de la Parroquia; empezó la nueva productora de medios audiovisuales católicos: ECCO “Escuela Católica, Cristo Comunicador” así fue el nombre en un primer momento del proyecto que nació el 19 de marzo 2010 en la fiesta de San José, a quien se consagró esta obra de evangelización, y que más adelante se llamaría: Amén Comunicaciones.
El sueño se había hecho realidad en un sacerdote deseoso de transmitir el mensaje del Evangelio; faltaba todo por hacer, pero el corazón estaba pleno por empezar, y con la ayuda de Dios se lograría. Las obras de Dios se construyen con poco, lo único que se necesita es fe, amor y deseo de servir. Lo que se diría en términos de San Ignacio de Loyola: “Actúa como si todo dependiera de ti, sabiendo que en realidad todo depende de Dios”.
El primer paso con las manos en la obra fue convocar a algunos feligreses comprometidos para dar inicio al Proyecto, y con la claridad de conformar, más que una empresa, una familia espiritual, y sosteniendo un ambiente de comunión y fraternidad, se creó la producción inicial y el hilo conductor del trabajo de la productora: el Evangelio.
Evangelio es la Palabra de Dios que da vida, es el alimento para el alma, es la luz para nuestra existencia y, además, es Buena Noticia ¿Cómo no comenzar con este tesoro tan importante para un cristiano?
De esta manera, inicia esta aventura que cada día despierta nuevos retos y, en definitiva, una de las formas que más impulsa la Productora para que conozcan y vivan al Señor es por medio de la Sagrada Escritura. Nuestra amada iglesia presenta para cada día del año diferentes lecturas que nos acompañan en todo el proceso de fe. Por eso, difundir el Evangelio no es accesorio, sino que es el centro de la profesión de fe.
La divulgación del Evangelio inició de una manera muy sencilla, por medio de la grabación en CD de las homilías del padre Carlos Yepes que se distribuían entre los feligreses que asistían a las misas, grupos de oración y eventos católicos que se hacían en la Parroquia.
Un tiempo después, se dispuso de otras producciones que también se compartirían bajo este mismo formato. Para el año 2011, ya se contaba con El Rosario de adultos y de niños, la Coronilla a la Divina Misericordia, y la vida de los santos, nombrado en Amén Comunicaciones como: Héroes del Amor. Esta última producción mostraba la historia y enseñanzas de hombres y mujeres de fe que vivieron los caminos de Jesús y entregaron todo de sí por el amor y el servicio a Dios.
En este mismo año, también se empezaron a desarrollar contenidos existenciales acordes a la vida diaria, y así nació el programa “Vivir con Sentido”.
Hoy, el ser humano necesita dar respuestas a su vida, ir más allá, tener un panorama más amplio en el que se identifique para qué está en la vida, y esto implica atender una dimensión más transcendente, donde cada persona se auto conozca, entre en su corazón y descubra su relación con Dios. Porque el mundo no es solo exterioridad, es también interioridad y, que mejor manera de conocer la profundidad del océano interior de la existencia que mostrarlo de manera sencilla a través de una reflexión aterrizada y precisa al mundo de hoy.
Vivir con sentido, se presentó, entonces, con reflexiones sobre diferentes temas, motivando a las personas a entender valores fundamentales de vida como:
el amor, la gratitud, la comunicación, la familia, los hijos, el matrimonio, la solidaridad, la unidad y sana convivencia, pero también mostrando los problemas del ser humano representados en el odio, el rencor, el egoísmo, el orgullo, la envidia y la vanidad, para finalmente poder comprender que cada acción, buena o mala, que se tenga, siempre tiene una consecuencia y, por tanto, la elección de tomar decisiones acertadas es propia de cada persona. Sin embargo, pese a tener equivocaciones y caminos inadecuados, también hay opciones de cambiar, de convertirse, de perdonar, y es allí donde se abre una ventana a la sanación y al crecimiento espiritual y personal.
El programa “Vivir con Sentido” busca presentar soluciones desde diferentes ámbitos y llegar con respuestas de vida concretas. Por eso, a partir de esta claridad conceptual y con la oración, unción de Espíritu Santo y el deseo de querer evangelizar, se ha podido tener, hasta hoy en día y para la gloria de Dios, más de 150 producciones con temas actuales que orienten y den luces al propósito de vida del hombre de hoy.
Entre algunos de los títulos de los contenidos desarrollados se tienen los siguientes:
Diez sabidurías de vida, Abecedario del Amor, Sufre menos vive mejor, Caminos de paz, No tengas miedo, Perdónate, Construir sobre la Roca, Matrimonio feliz, Quien reina en mí, Sed de Dios, Que yo vea, El que en Dios espera no desespera, Caminos de la alegría, Dinero fascinación o espejismo, Siete regalos para Dios, Cambia el rumbo de tu vida, Despierta: estas vivo, esterilidad del corazón, entre el bien y el mal, Dame humildad, S.O.S Familia, proyecto de vida para jóvenes, vivir sin máscaras, libérate a ti mismo.
La Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús fue un espacio abierto a la oración, a las actividades pastorales, a los grupos católicos, a la acción social con habitantes de calle, pero también fue un espacio sagrado donde se consolidó Amén Comunicaciones como obra evangelizadora de Dios. Allí, precisamente en esta parroquia ubicada en un sitio marginado, con alta población de habitantes de calle, talleres de carros y calles atiborradas de repuestos automotores creció la productora. Fue un tiempo de arduo trabajo y oración donde se generaron grandes ideas para la evangelización que hoy han llevado a dar fruto.
Lo que inicialmente empezó con la grabación de CD, después llevó a la elaboración de medios escritos coleccionables que inspiraran y alimentaran la fe y los valores de familia, y es donde se lanza la revista Amén Comunicaciones, una producción mensual pensada en valores cristianos que ayudaran al crecimiento personal, familiar y espiritual de la gente.
La revista Amén Comunicaciones se concibió con mensajes cortos, prácticos y existenciales que invitaran al dialogo interior, a la fe y el sentido de vida.
La línea editorial se enfocaba en cuatro pilares fundamentales: motivación para el amor, la esperanza, la fe y la familia, así podrían leer los feligreses secciones como: Vitaminas para el alma, Escritos que dan vida, Fe y Familia.
En esa misma Parroquia, y bajo el mismo esquema de formato escrito, Carlos Yepes escribió varios libros entre ellos: Palabras de Vida y El Camino de la Serenidad, que fueron distribuidos por el canal de televisión católico regional que él apoyaba en la evangelización en ese entonces.
Más adelante, con el mismo entusiasmo y fuego interior de transmitir aún más la palabra de Dios se lanza el Libro “Vivir con Sentido” un texto de fe, de amor y forma de vida en Cristo, directamente gestionado por Amén Comunicaciones.
Posteriormente, se lanzó el libro “En sintonía con Dios”, y de este material impreso hay una anécdota muy especial y bella por recordar, porque fue plasmado por una señora que iba frecuentemente a la Parroquia. Ella decía textualmente: “no me pierdo las Eucaristías que realiza el sacerdote Yepes, porque siento que me llenan el alma y me dan paz y sosiego”. La feligresa las consideraba tan valiosas que al terminar cada Eucaristía salía a su casa y llegaba a escribir los mensajes del Sacerdote Carlos Yepes, y así llegó a completar más de 100 enseñanzas del Padre.
Al tener esta cantidad de material escrito, la colaboradora le propuso al Padre divulgar este contenido, y con la autorización de él, fue llevado al canal de televisión católica regional que él mismo apoyaba, para que lo distribuyera. El libro salió con las enseñanzas de Yepes y otros sacerdotes.
Entre los años 2012 y 2013 se vislumbró la posibilidad de llegar a más personas que pudieran conocer la palabra de Dios, no solo con las grabaciones en CD que se distribuían en la Iglesia, sino también a través de una divulgación más masiva de la fe.
Bien lo dice el Papa Francisco, cuando expresa “callejeen la fe, lleven a Jesús a cada esquina, a cada plaza, a cada rincón de la tierra”.
La evangelización tenía que traspasar fronteras y es cuando se ve la necesidad de entrar en la virtualidad y así poder cubrir más espacios que invitaran a la oración y al conocimiento de las enseñanzas de Jesús.
La iniciativa con la cual se dio este salto fue “Palabra Express”: un mensaje corto del evangelio diario, que alimenta al hombre de hoy.
El mundo estaba en la era del desarrollo tecnológico y la llegada de los celulares como herramienta para comunicarse unos a otros era una oportunidad para llevar el evangelio a más personas.
Por este tiempo, la aplicación de mensajería instantánea que estaba revolucionando el mundo era WhatsApp. Las personas intercambiaban mensajes entre sí, y los replicaban también entre grupos, amigos y familiares, y estos podían convertirse en virales, dada la facilidad y rapidez con la que se compartían. Estamos hablando de un medio por donde transitaban noticias y mensajes de todo tipo, cadenas de memes, frases célebres; chistes, y la pregunta que se planteó Yepes en ese entonces fue: ¿por qué no romper el estereotipo de contenido que se recibía por medio del celular para inspirar el día con la mejor de las noticias, con la buena noticia por excelencia: el Evangelio? ¿Por qué no llegar a los corazones de personas del mundo entero para enamorarlos del Señor y que se deleitaran en su amor?
El sueño de sembrar la semillita del Evangelio a través de WhatsApp era el nuevo reto, era maravilloso poder lograr que la gente pudiera escuchar cada mañana la Palabra de Dios, la meditara y empezara el día con una buena noticia que la fortaleciera y alimentara espiritualmente.
En el inicio de esta nueva hazaña, se necesitaba tener una línea institucional, establecer contactos y empezar a divulgar y promover cada día la escucha del Evangelio, fue así como Amén Comunicaciones incursionó en la mensajería instantánea llegando a ser el primer medio católico en enviar el evangelio por WhatsApp en Colombia, y ello implicó romper barreras sociales, porque por un lado las personas no estaban enseñadas a recibir este tipo de contenidos por este medio, y por otro lado, hubo algunos públicos que lo rechazaban y buscaban que no se divulgara, pero la confianza en el Señor era grande y poderosa.
Para el año 2014, con Palabra Express se contaba con un servicio gratuito y estructurado de evangelización. Tenía su identidad de marca, que entregaba el contenido valioso del Evangelio al instante.
La transformación de WhatsApp fue muy linda, porque el envío diario de audios del Evangelio con la reflexión del padre Carlos Yepes fue llegando, poco a poco, a cada uno de los hogares, contactos de familia, amigos, compañeros de trabajo, grupos católicos, colegios, catequistas, y la gente manifestaba agradecimiento y entusiasmo por recibir este contenido. Motivo por el cual, lo replicaban una y otra vez, alcanzando a más personas, y trascendiendo regiones, ciudades y países.
Hoy, tener el cálculo de cuantas personas reciben Palabra Express es casi imposible. Y no se trata de cantidad, sino de calidad. No se trata del número que, humanamente, se pueda tener, sino las almas que abren su corazón al seguimiento de Jesús.
Con el tiempo se detectaron nuevos desafíos, y era poder alcanzar a más personas que cultivaran su fe, y es cuando se define la importancia de incursionar en otra aplicación de mensajería instantánea y se empieza a considerar Telegram.
Telegram, al igual que WhatsApp, empezó con los Evangelios, pero no enviados en audio sino en video, buscando una manera auditiva y visual de recrear y acercar más cada persona al Evangelio. Hoy, por medio de Telegram no solo se envía el Evangelio, sino una amplia variedad de contenidos como el Santo Rosario, la Coronilla, la Santa Misa, la liturgia de las horas, las novenas y las reflexiones del sacerdote Carlos Yepes.
La vida cambia todo el tiempo y Amén Comunicaciones acorde a los tiempos de hoy y la tecnología se ha preparado con esmero durante estos 11 años para evangelizar y llevar la fe a la nueva era digital de la comunicación.
Para Amén Comunicaciones, el año 2014 estuvo marcando por grandes frutos, no solo en la difusión del Evangelio “Palabra Express” por WhatsApp sino también porque se creó la emisora On-line Amén Radio, una propuesta digital que llegara a otros espacios.
El mundo estaba cambiando aceleradamente y era importante la adaptación y la preparación a las nuevas opciones digitales y entre ellas se tenía claro la relevancia de la radio en la evangelización y propagación de la fe.
Amén Comunicaciones en un principio estudió diferentes temáticas de programación en la radio y se pensó para este nuevo formato, la exploración de entrevistas y conferencias de sacerdotes, teólogos, laicos, psicólogos, que pudiesen hablar de los jóvenes, los hijos, las parejas, las relaciones afectivas, todo enmarcado en el entorno de la familia como pilar fundamental de la sociedad. Bien lo dice el Papa Francisco cuando habla de la Familia, refiriéndose a que es un tesoro precioso que hay que sostener y proteger.
Amen Radio, partió entonces de un eje fundamental que era alimentar la esencia de la familia cristiana y los valores universales de respeto, amor, fe, unidad, gratitud y fraternidad, y así mismo la búsqueda interior del hombre de hoy y su sed de Dios. Aunque al principio tuvo grandes limitaciones y esfuerzos para salir al aire por la falta de sistematización de contenidos, lo hizo con algunos programas, entre ellos el que se denominó: “Tiempo de Orar”.
Con el pasar de los meses, la inversión de recursos, la formación en las diferentes áreas del conocimiento, se llegó a lo que es hoy Amen Radio, una emisora católica Online con una parrilla de programación 24 horas, siete días a la semana y presencia en diferentes países que ha contado con el apoyo de grandes colaboradores que han puesto su granito de arena en la evangelización y a los cuales Amén Comunicaciones presenta una inmensa gratitud por ser parte de este sueño de evangelización.
Aun así, la tecnología del audio digital no ha parado, ni tampoco la evangelización. Hay nuevos cambios importantes en la era de internet, que han llevado a tener retos internos más exigentes dentro de Amén Comunicaciones para llevar el evangelio al mundo moderno, esto ha implicado entender, asimilar y liderar esquemas de comunicación que hace unos años eran impensables, pero que ahora son una realidad.
En la actualidad, dentro de estas nuevas vertientes tecnológicas del audio digital está, no solo la radio on line, sino también el Podcast, como otra opción para escuchar audios de diferentes temas e historias que deseen ser contadas.
Hoy, la productora está haciendo Podcast para nuevos públicos y sigue en su continua búsqueda y desarrollo de contenidos para la evangelización digital.
El sueño de evangelización como lo concibió Yepes desde el principio cubría no solo a los adultos, las familias, los jóvenes, los feligreses, los catequistas y grupos católicos, sino también a los niños, había que catequizarlos y hablarles de Dios desde su lenguaje infantil y es así como se desarrolla la idea de una categoría de contenidos de evangelización llamada “Amen Kids”.
Amen Kids ofrece una serie de animaciones en 3D con historias de la biblia: ¿Cómo creo Dios el Mundo?, Adán y Eva, Caín y Abel, Abrahán, José, el arca de Noé, la torre de Babel. Por otro lado, también se promueve el rosario infantil y mensajes de vida de santos como: Madre Teresa de Calcuta y San Juan Bosco; además de cuentos con énfasis en valores El carpintero y El mejor ahorro.
Con el pasar de los años, y con el mismo objetivo de comunicar la Buena Noticia, se migraron los contenidos que solían presentarse en formato CD hacia las distintas redes sociales: Facebook, YouTube, Instagram y Twitter.
Para la semana Santa del año 2017, Amén Comunicaciones, llamada espontáneamente Amen TV, inició uno de los más arduos proyectos para la evangelización, las transmisiones de las Eucaristías Digitales.
Las Eucaristías Digitales se conciben como un aporte para la comunidad de adultos mayores, personas enfermas (con limitaciones para salir) y para personas de otras regiones, ciudades y/o países donde la iglesia está lejos y no hay oportunidad de asistir a la Misa.
Las primeras Misas se grabaron en un salón de un colegio y, posteriormente, se pasó a hacer las transmisiones desde una capilla de unas monjitas en la ciudad de Medellín.
Esta evangelización tuvo impacto e interés en la televisión y fue así como Amén Comunicaciones empezó a enviar la Eucaristía Digital a varios canales de televisión a la vez para que la transmitieran. Uno de ellos fue un canal de televisión venezolano enfocado a la familia con cobertura para Latinoamérica, otro canal fue uno ubicado en Medellín enfocado al entrenamiento, la política, las noticias que tenía cobertura para Antioquia y así mismo otros canales comunitarios que transmitían para pueblos y municipios alejados. De este modo, las Eucaristías digitales han acompañado, a través del tiempo, a los feligreses, los días martes, jueves y domingo, día del Señor
Para el 2018, “Amén Comunicaciones” y “padre Carlos Yepes” se habían consolidado como líderes en la web y programas más vistos en televisión, gracias al esfuerzo y amor para enseñar la palabra de Dios. Pero el ser pioneros, ha exigido la superación de los retos con el pasar de los años.
Actualmente, las Eucaristías digitales cuentan con un grupo de sacerdotes, fieles seguidores de Jesús, con ideales comunes en la evangelización, apasionados por su ministerio, ungidos por el Espíritu de Dios, y con el amor y el cariño para evangelizar. Hoy damos gracias a cada uno de ellos por estar presentes en muchos corazones.
Es así como los Evangelios y las Eucaristías Digitales llegaron en un principio a redes y posteriormente a la conquista de una evangelización con un alcance mundial, una evangelización cada vez más enriquecida con contenidos de valor en la fe, que fueron llegando a los hogares con diferentes temáticas entre ellas: los salmos, las oraciones oficiales de la Iglesia Católica: laudes, vísperas, completas, la vida de santos, el rosario, la coronilla, las novenas y advocaciones marianas, entre otras.
Con la página web, se abre la posibilidad de combinar los distintos formatos: texto, imagen, audio y video, en un mismo lugar. Se trata de trasladar la “casa”, las “instalaciones” a la virtualidad, donde las personas pueden visitar la Productora Católica, accediendo desde cualquier navegador, y encontrar gran parte del contenido que se ofrece.
Actualmente, se cuenta con la presencia on-line de dos páginas; la institucional: www.amencomunicaciones.com, y la personal: www.padrecarlosyepes.com
En la primera, los vértices de contenido se enfocan más hacía lo social y las devociones de la Iglesia, mientras que, en la segunda, el enfoque es más litúrgico y existencial. Sin embargo, las dos tienen como objetivo comunicar la buena noticia del Evangelio.
Siempre hay buenas noticias para contar, y a través de ambas páginas web se puede recoger información que inyecta esperanza. Los contenidos que se comparten por estos medios, permiten a quien ingresa a “navegar”, profundizar sobre las preguntas más recurrentes en la fe.
Hoy vivimos una era digital sin precedentes, con cambios en estilos de vidas, costumbres y formas de trabajo cada vez más desde la casa, que han permitido avances gigantescos en la comunicación e interacción entre ciudades, países y continentes. Cambios que llevan a que las personas puedan estar conectadas desde cualquier parte del mundo y conocer información al instante desde cualquier dispositivo.
Esta es también la era de los datos y la sociabilización global, y esto ha beneficiado y contribuido al mundo entero, es así como Amén Comunicaciones ha preparado toda su infraestructura técnica para hacer transmisiones en vivo de eventos católicos como la Semana Santa desde el Vaticano, que se ha hecho durante varios años logrando llevar a la comunidad, lo último y más destacado, gracias a la tecnología.
Nacemos en la vida para tener un propósito y aunque no lo identifiquemos en primera instancia, el sentido más profundo de nuestra existencia es amar y servir.
El mensaje de Jesús está precisamente centrado en estas dos palabras fuertes y poderosas que son el amor y el servicio a los demás, solo así cuando se cumplen plenamente, el ser humano podrá lograr su propia realización personal.
Si miramos como vive el mundo de hoy, encontramos que hay conflictos, crisis, divisiones y nos preguntamos ¿por qué no somos felices?, ¿por qué estamos solos?, ¿por qué no sabemos convivir?, ¿por qué no sabemos amar?, esos por qué nos llevan a buscar respuestas y tener un sentido más trascendente de la vida, más desde nuestro interior.
La pregunta final es ¿dónde podemos obtener estas respuestas? Si desde pequeños nos enseñan a estudiar, conseguir, tener carro, casa, finca…y es a través de este punto crucial donde se requiere tener a la mano una “Escuela de Vida desde la Fe” que nos hable y nos ayude a vivir bien, a ser mejores seres humanos y estar en paz.Esta “Escuela de vida desde la Fe”, tuvo sus inicios en la serie Vivir de Sentido de Amen Comunicaciones, y posteriormente hubo una transformación que llevó a desarrollar tres tipos de programas, así:
– “Hablemos” un espacio de dialogo para que la gente interactúe dentro del programa con temas de la vida cotidiana.
– “Reflexiones del sacerdote Carlos Yepes” un espacio de enseñanzas de vida, con temáticas de crecimiento y superación.
–“Testigos” un espacio para mostrar testimonios de personas de fe que abren su corazón y cuentan su forma de vivir y conocer el amor de Dios y cómo han encontrado sentido en la vida.
Una vida con sentido es el ideal de toda persona, ¿Por qué no dar herramientas? Si la labor de un buen pastor es estar al lado de sus ovejas, acercarse a la gente, escucharla, orientarla, aconsejarla y es que dentro de la filosofía de vida del Sacerdote Carlos Yepes y los que hacen parte de este apostolado está en servir a la comunidad, entenderla y ayudarla.
Pero algo también muy interesante de estos programas es que se hacen en vivo, en directo, y los oyentes pueden participar de manera simultánea en el programa.
Desde el principio, y hasta ahora, cada idea de evangelización ha tenido una revisión exhaustiva para comunicar el mensaje. Detrás de cada contenido, hay un sinnúmero de detalles claves, que van desde la parte inicial del tema, la conceptualización del mismo, el soporte teológico, su orientación a la vida diaria, hasta la selección adecuada del medio de transmisión, preparación técnica audiovisual, manejo de ayudas para comprensión fácil del mensaje, estándar de calidad y distribución en medios.
El resultado es el esfuerzo de un equipo de personas de fe, que buscan llevar un contenido valioso para el mundo de hoy, un equipo cuya recompensa es Hacer el Bien, lograr un mundo mejor, desde el mensaje de Jesús.
La fe es parte de nuestro ser trascendente y cada día, Amen Comunicaciones, se enfrenta a nuevos desafíos para darla a conocer y para que sea fortalecida.
Más que barreras, más que paradigmas, más que tropiezos en el camino, la fe es el más hermoso tesoro que podemos transmitir con amor, ese ha sido el éxito del equipo de Amen Comunicaciones, no dejarse vencer por obstáculos, perseverar, orar y confiar en Jesús, María y José.
Antes de lanzar los contenidos, se explora, se analiza y se socializa con sacerdotes y laicos para materializar la comunicación de una manera pedagógica, acertada y fácilmente comprensible para cada audiencia; es así como cada proyecto de evangelización se enfoca en las necesidades del ser humano de hoy.
Es desafío diario implica conocer lo que le duele al mundo actual, entender cómo percibe la fe, comprender su entorno. Por eso, cada contenido tiene un periodo inicial de oración, en el que se afinan los objetivos y el enfoque.
La razón de ser de la productora para el sacerdote Yepes responde a la tarea encomendada por el mismo Jesús de ir y hacer discípulos a todas las naciones, de sortear las barreras para que sean, cada vez, más personas las que conozcan la verdad del evangelio y experimenten el gozo sanador de tener a Dios en el corazón.
Cómo consolidar un equipo de trabajo que reme hasta la otra orilla.
Muchas personas ven el resultado, pocas se imaginan lo que hay detrás de cada contenido.
Consolidar un equipo de trabajo comprometido con la obra de evangelización no es labor basada en las fuerzas humanas. Se ha escuchado que uno de los temas más álgidos es el trato o “manejo” de personal. Pero consientes de no estigmatizar este tema, en Amén Comunicaciones se confía a cada persona en las manos de Dios, para que sea Él quien disponga cada vida a su servicio y la consagre desde procesos personales que siempre se intentan respetar.
Para Yepes, el éxito no está en elegir las personas, sino en tener la certeza de que Dios las elige primero y despierta en cada una la pasión por hacer siempre lo correcto y lo mejor. Cada talento y carisma es valorado, se anima a profundizar en la misión con pasos humildes pero gigantes, sin miedo. Dando un paso a la vez.
Muchos frutos en la evangelización no se dan porque el talento humano sea superior, sino porque el compromiso y confianza en el Señor son superiores. Sin embargo, reconoce la importancia de la formación del equipo de trabajo para aportarle a la evangelización los mejores estándares de calidad.
Para Carlos Yepes, el ambiente de familia y fraternidad es uno de los ingredientes que más jalona el identificador de la Productora. De hecho, al llegar a las instalaciones de Amén Comunicaciones se percibe un ambiente de unión, sentido de pertenencia y alegría por el anuncio del Evangelio.
En las manos de Dios, siempre lo mejor está por venir.
Hoy Amen Comunicaciones cuenta con una historia imborrable que se ha escrito paso a paso desde el año 2010, forjando una vida de fe y esperanza para el mundo.
Los sueños se hacen realidad si se quieren y si se apoyan en Dios. Lo que empezó como un granito de mostaza en un pequeño salón de la parroquia del Sagrado Corazón, hoy llega a más de 10 millones de visitas mensuales en el mundo, la obra de Dios ha comenzado, la incursión de la evangelización masiva a gran escala es un hecho, pero el trabajo continúa, los retos siguen y la obra seguirá, Amén Comunicaciones es el Sí del hombre a Dios.
El Padre Carlos Yepes es un sacerdote Colombiano reconocido por su labor evangelizadora en los medios de comunicación a través de los cuales hace:
Es una productora audiovisual Católica, dedicada a la evangelización digital y de televisión.
Su misión es anunciar el evangelio de manera clara, sencilla y existencial al hombre de hoy, tan necesitado de un mensaje de sabiduría, paz y esperanza para su vida.